La inauguración de la Esgrima Maestros Calcagno - Della Cella (MCD) se realizó oficialmente el 9 de mayo del 2007. Fabián Sales, maestro de la nueva Sala, presentó ante sus alumnos a sus antecesores, el Maestro Cándido Domínguez, el Maestro Aníbal Calcagno y el Maestro Flavio Della Cella. Luego de conversar formalmente sobre la historia de MCD y su significado, leyó textualmente una carta enviada para la ocasión por el Maestro Aníbal Calcagno, de la que expresamos aquí el final de la misma:
"... Hoy felicito la iniciativa de mí querido amigo y alumno Fabián Sales, tercera generación de maestros de la escuela del Maestro Domínguez, quien hoy a la distancia emprende el gran y gratificante desafío de continuar con sus enseñanzas, descontando y deseando a todos el mayor éxito en esta empresa.
En la certeza de que este reconocimiento habría representado para el Maestro Domínguez un profundo orgullo además de un gran honor, quiero decirles que cuentan con un nuevo grupo de amigos, los miembros de la sala MCD Uruguay, y seguro que este es el comienzo de una etapa de grandes logros."
Los alumnos pioneros de la Sala MCD son: José Montero, Abelardo Vladich, Allan Calderón, Jonathan Ramírez, Victoria Dames, Alejandro Mora, Mauricio Segura y Liubov Otto.
Posteriormente a la presentación de los maestros y a la lectura de la carta del Maestro Calcagno, el Maestro Sales lee un discurso de compromiso escrito por él mismo para la ocasión, del que expresamos aquí el final del mismo:
"MCD de Costa Rica honra con su nombre al Maestro Cándido Domínguez, al mismo tiempo que reconoce y agradece en vida a quienes supieron mantener vivo el espíritu esgrimístico que promulgó el Maestro. Además de los sobresalientes resultados deportivos conseguidos por MCD en Uruguay y en todo Latinoamérica, los Maestros Calcagno y Della Cella siempre pusieron énfasis en lo que consideraron como inseparable de la Esgrima: la honestidad. Ellos decían y dicen, en palabra y acción, que la Esgrima forma hombres y mujeres de bien.
Aunque parezca trillado y aunque la palabra “bien” sea para muchos relativa, en la Sala de Armas MCD de Costa Rica, nos relacionaremos siempre con esta actitud de BIEN, conjuntamente con un espíritu competitivo honesto, leal y de sólidos principios éticos.
Por otra parte destacamos como fundamental para el buen funcionamiento de la Sala, la disciplina, la entrega y el compañerismo.
Agradezco en primera instancia a mis alumnos, quienes además de interesarse por este deporte, confiaron en mi persona como entrenador. También agradezco a Luis Cruz, Presidente de la Asociación Costarricense de Esgrima, que apoya esta iniciativa.
Los que se mantengan este año como miembros de esta Sala serán los pioneros de la misma y eso para mí significa mucho, por el respeto que tengo por mis Maestros y por nuestro propio compromiso. No tengo interés en que todos los que aseguren comprometerse con esta Sala se mantengan en la misma. Me interesa que formen parte de la Sala quienes tengan de verdad el deseo y la capacidad de asumir este compromiso.
Nuestro camino se deberá basar siempre en una humildad interna y no sólo de palabra. Sin embargo vale destacar, quizá como desafío, que no todos están en condiciones de asumir la Esgrima desde la visión que propone la Sala MCD.
Esto recién comienza. Nos falta conocernos mejor. Nos falta afinar nuestro propio reglamento y redefinir nuestros objetivos individuales y grupales. Espero que pronto podamos encontrar una dinámica de entrenamiento y convivencia que haga surgir la mística necesaria. El espíritu esgrimístico fundamental para conseguir buenos resultados deportivos y humanos."
Luego de la zona oficial, que se desarrolló con alegría y emoción sinceras de parte de todos los presentes, se pasó al entrenamiento de esgrima.